Doy Miedo?

En algunas ocasiones, doy miedo.

O eso me ha dicho más de una vez alguien con quien converso durante cierto tiempo. 

Profundizando un poco mas con alguno de ellos… he llegado a la conclusión de que lo que asustan no son las cosas que me gustan o que podría o no llegar a hacer si no que más bien es todo lo que puede llegar a ocurrir mientras lo consigo y no.

Literalmente mi compañero de conversación me dijo que lo mío era “Controlar los tiempos”  y “Como hacer llegar ese momento justo en el que el control pasa a ser todo mío”

Y concluía:

“Al final lo que realmente da miedo es que no solo acabarás consiguiendo lo que quieres, sino que encima te suplicaran que lo hagas”.

Casi nada… 

Muchas veces he comparado esto de la D/s con una semilla que se planta:

El buen jardinero, antes de plantar su semilla, se preocupará  de no usar cualquier tierra. Buscará una que sea buena y fértil.  La preparará poco a poco antes de depositar en ella la semilla, que también habrá cuidado previamente.

Una vez plantada, la cuidará a diario, se preocupara por su temperatura, la regará cuando sea necesario, y de vez en cuando también la abonará para que crezca bien fuerte y sana…

Y si es buen jardinero, la semilla crecerá y habrá que seguir cuidándola, porque al final es una responsabilidad que no acaba.

¿Tiene o no que ver con la D/s?

Así que si este es el “miedo” que doy, estoy encantada con asustar, porque precisamente esas son las cosas que hacen que esto para mi realmente tenga sentido… ese enganche de sensaciones, ese querer mas, ese conseguir cada día un poquito y sobretodo, que la otra persona lo desee cada vez mas.